Villaviciosa, en donde este lunes fue fiesta local, alargó el primer fin de semana de sus celebraciones. La jornada arrancó con el primero de los encierros, que transcurrió con normalidad a excepción de que uno de los pastores que velaba por el buen desarrollo del mismo se rompió la tibia.
La calle Carretas y la plaza de la Constitución fue, posteriormente, escenario de varios espectáculos infantiles, de los que disfrutaron los villaodonenses pequeños que tampoco tuvieron cole. Mañana y tarde hubo ludoteca infantil e hinchables.
Los toros también tuvieron fueron centrales en la franja de tarde, acogiendo la primera faena de las Fiestas en forma de novillada mixta. El primero y el cuarto corrieron a cargo del villaodonense Juan José Bellido «Chocolate», que fue de menos a más en sensaciones y se llevó una oreja en cada novillo. Amor Rodríguez se llevó tres (dos y una) mientras que Ángel Sánchez fue el gran triunfador tras dos orejas en el cuarto y ser indultado su segundo, el último de la tarde.
El concierto del día trajo Liverpool a Villaviciosa, convirtiendo a la plaza de la Constitución en The Cavern. Con estas dos pistas, y ayudados de las fotos, quizá haya pocas dudas de quien se subió al escenario. Este tributo a los Beatles -españoles pero que, con gran humor, hablaban entre canción y canción en castellano con acento- levantaron la nostalgia de escuchar a uno de los grupos más importantes de la historia de la música. Una estética muy cuidada, sonidos pop, una gran imitación de Lennon, McCartney, Harrison y Starr y, por supuesto, la interpretación de himnos universales como «Yellow submarine», «Hey Jude», o «Let it be», hicieron pasar a los asistentes al concierto -bastantes más que al de Marilia- un gran rato de diversión.
Las fiestas continúan.
Fotos: Prensa Ayuntamiento/Redacción